sábado, 1 de marzo de 2008

INTRODUCCION A DOS PUEBLOS ORIGINARIOS (IV PARTE)


El COMERCIO COLONIAL
Las autoridades españolas organizaron el comercio con sus colonias imponiendo un riguroso monopolio comercial. De acuerdo con este sistema únicamente las colonias podían intercambiar bienes con España. Legalmente les estaba prohibido realizar intercambios de bienes entre si y con otros países europeos. Mediante este sistema España trataba de disponer exclusivamente de las riquezas americanas evitando la participación de potencias rivales en el comercio colonial.
El sistema comercial español contempló un esquema de puertos únicos.
Las mercaderías destinadas a abastecer el consumo de las poblaciones americanas se embarcaban en un solo puerto: primero, el de Sevilla; más tarde, el de Cádiz. El transporte se realizaba en flotas de barcos mercantes que hacían la travesía protegido por barcos de guerra, los galeones, cuyo objetivo era evitar el asalto de los barcos piratas. La flota (que partía dos veces al año, en los meses de enero y agosto respectivamente) llegaba al Caribe y allí se separaba: algunas embarcaciones iban a Veracruz (México) y la Habana (Cuba), mientras que otras se dirigían a Cartagena (Colombia) y Portobelo (Panamá). Luego las mercaderías eran transportadas por vía terrestre hasta el pacífico, donde eran embarcadas hasta el puerto del El Callao (Perú). Las mismas eran acopiadas por los comerciantes limeños y posteriormente distribuidas por el interior del Virreinato, desde el Alto Perú hasta el río de la Plata.
El monopolio comercial, establecido por la corona española con el objeto de impedir la participación de las demás potencias europeas en el intercambio con sus colonias, no pudo superar el obstáculo de las distancias. Las mercancías europeas tardaban meses en llegar desde Veracruz y Portobelo hasta los puntos más alejados de los dominios españoles en el norte y el sur del continente, y su precio resultaba encarecido por los impuestos y el transporte que debían abonar. El resultado fue la aparición del contrabando cuya práctica se difundió ampliamente en las colonias españolas.

La minería de plata
La minería de plata fue la actividad económica fundamental en la época colonial y, por lo tanto, la principal fuente de ingresos de la Corona española, que recibía un quinto de todos los metales que se extraían en América. Los principales yacimientos de plata se descubrieron en Zacatecas (México) y en San Luis de Potosí (Alto Peru).
La organización de la economía indiana en torno a los centros mineros dará lugar al desarrollo de economías periféricas o satélites que orientarán su producción en función de los requerimientos de ese polo de desarrollo. Parte del actual territorio argentino, incluidas las misiones Jesuíticas, orientaron sus actividades productivas en función de las necesidades del mercado Potosino. La producción de yerba, algodón, azúcar del noreste; la ganadería (especialmente mulas) del Litoral; la producción de vinos, aguardiente, frutas secas de Cuyo; los textiles, manufacturas y artesanías del noroeste; la construcción de carretas en Tucumán; la industria artesanal y textil de Córdoba se orientaban a satisfacer las demandas del mercado surgido como producto de la explotación minera en el Alto Perú.

SISTEMAS DE TRABAJO
La fuerza de trabajo indígena fue la preferentemente utilizada por los españoles no sólo en la explotación minera, sino también en la producción de alimentos, provisión de servicios, etc. Entre las distintas formas que adquirió la explotación de la fuerza de trabajo indígena podemos mencionar a la encomienda, la mita y el yanaconazgo.

La encomienda
“Sin indios no hay indias”, solía decirse en el siglo XVI. Desvanecida la quimera de los tesoros escondidos, sólo quedaba la posibilidad de organizar en el Nuevo Mundo una sociedad señorial, como la europea, construida sobre la base del trabajo indígena. Los blancos vivían separados de los aborígenes, pero, a la vez, los necesitaban como mano de obra. Si bien los españoles aceptaban que los indígenas eran seres humanos, pensaban que, como los niños, no eran responsables de sus actos y, por lo tanto, debían ser “encomendados” al cuidado de otros. Por esa vía se justificó su sometimiento a una forma de servidumbre –la “encomienda”– y los conquistadores se transformaron en “encomenderos”. De acuerdo a esta institución, lo españoles tenían la obligación de instruir a los indios encomendados en la fe católica y de proveerle los recurso necesarios para vivir dignamente. A cambio, la Corona les reconocía el derecho de recibir tributos de los indígenas, en dinero, en especie (alimentos, tejidos, etc.) o en trabajo (construcción de casas, cultivo de tierras o cualquier otro servicio). Las disposiciones legales fueron letra muerta y la explotación del indígena fue la constante.

La Mita
La mita era un sistema de trabajo incaico en la que los varones adultos de cada poblado estaban obligados a trabajar –en forma rotativa- durante un determinado período de tiempo en tareas comunitarias. Los españoles mantuvieron este sistema de servicio personal pero le cambiaron su sentido originario: forzaron a los indígenas a prestar trabajo en las minas y en los cultivos. Las durísimas condiciones de trabajo y la sobreexplotación a la que fueron sometidos, provocaron una gran mortandad entre los mitayos e indujeron, a los demás indígenas, a huir de las encomiendas para evitar el reclutamiento.
El yanaconazgo
El yanaconazgo era otra institución de origen incaico que los españoles adoptaron durante el período colonial. Los propietarios de haciendas o estancias (españoles venidos a América luego de la conquista y que por no haber participado de ella no disponían al igual que los encomenderos del trabajo gratuito de los indígenas) empleaban como mano de obra para el trabajo en sus tierras el servicio personal de los llamados naborías o yanaconas. Se trataba de indígenas afectados generalmente a las actividades agrícolas y sujetos a la tierra a perpetuidad. El producto de su esfuerzo era apropiado por su propietario a cambio del mínimo necesario para su reproducción como fuerza de trabajo. A diferencia de las comunidades de indígenas, los yanaconas estaban exentos del tributo y del servicio de la mita.
Foto. Fortaleza Inca: Machu Pichu (Perú) Lengua Quechua; en español: Cima Vieja.


14 comentarios:

Unknown dijo...

Hola Nestor, soy Helena y estoy contestando tu comentario a mi blog: gracias por gustar del Tango.
Mi madre era de Santa Fe, asi que tengo un especial cariño por esa tierra.
Cuando quieras armamos alguna movida con el Tango en Santa Fe y me voy para alla.
Hermosos tus blogs y se ve y siente tu encuentro con la gente.
Helena

Anónimo dijo...

Hol Nestor, me leo tus escritos con asombro, porque los humanos no hemos aprendido nada. Se sigue explotando a otros humanos no de esa forma pero parecido, quiza aveces peor.Tambien como una lección de historia.Hemosa la foto.saludos
anamorgana

Princesa_DeAquelViejoReinoPerdido dijo...

La corona española intentó un monopolio en el comercio américano que le salió francamente mal. Lo aprovechó de una forma tan pésima que incluso sus enemigos sacaron mas partido.
Sigo leyengo la historia.
En respuesta a tu pregunta, no es de ese poeta que mencionas, sino una traducción de un fragmento la canción "strarway to heaven" de led zeppelin. Si nunca la has escuchado, te animo a que lo hagas, ñla letra y los maravillosos riffs te logran llevar al paraíso.
Gracias por tus comentarios y tu apoyo.
Un besazo!

eclipse de luna dijo...

Me gusta descubrir historias del mundo a traves de tu blog.
Gracias por tus visitas a mi eclipse..seguire viniendo para descubrir nuevas historias
Un besito y una estrella.
Mar

Marian dijo...

Sigo leyendo los retazos de la historia que nos muestras, siento vergüenza ajena, por la parte que me toca.
Soy totalmente contraria a la explotación humana, no entra en mi cabeza semejante comportamiento.
El Machu Pichu, me encanta, tengo varias fotos de el en mi ordenador como salvapantallas, me relaja mucho verlo.
Besos.

Barajas, distrito BIC dijo...

Grandísimo trabajo Néstor, enhorabuena.

Sobre el tema de la encomienda te diré que todavía no nos hemos quitado en Europa del mito del etnocentrismo que subyacia a esa institución.

Poca gente en aquella época estaba dispuesta a una relación multicultural con las nuevas sociedades. En su día tuve al suerte de acceder a uno de los pocos ejemplos de un estudio objetivo de costumbres, el realizado por Malaspina. Debería haber habido muchos más como él.

Saludos

_twiza_ dijo...

Encantada de q pases por mi blog!
El tuyo es muy interesante, con historias que todos deberiamos conocer.
Espero que visites más Mr.Treponki.
Saludos

Basquiat dijo...

se agradece la foto.
sigo todo esto con mucho interes, un abrazo amigo.

ღ ツ καяιηα ت ♕ dijo...

no soy adicta a la historia la geografia ni nada por ele stilo peor que lindos comentarios..
enserio em llamaron la atencion..

pero en realidad pasabba solo a saludar
besos..

Eliza dijo...

ohh que linda vista se ve!!! me encantaria poder viajar y disfrutar de las multiples maravillas del mundo, pero no puedo dejar de lado la universidad, ademas se necesita $$$ jajja cuidate thanks por los animos.

Sibyla dijo...

Hola Nestor!
Me ha gustado seguir todo el trabajo de investigación histórica que has efectuado.
Al compartirlo, podemos ver los diferentes matices de la esclavitud.

Me recordó también lo que ocurrió en Sudáfrica con el apharteid, fue algo también condenable y vergonzoso.
El hombre blanco no aprende, y todavía se continúan haciendo muchas injusticias.

Un cordial saludo:)

Anónimo dijo...

hola

gracias por tu mns en mi blog y pa nada es intromision ..je por eso existe la libertad de expresion. es dificil vivir en esta dulce o amarga obsesion. cuidate mucho...

xoxo

y muy buen trabajo de intestigacion eresr recapo..se ve q te gusta todo eso...chauuu

Ana dijo...

Besitos,solo pasaba a saludar!

Ana dijo...

Hola de nuevo,como quieres que te oriente ? tu empieza el blog y simplemente habla de ti y de lo que venga a la cabeza,ya verás como terminarás contando cosas tuyas.

Besos